Ir al estadio Atanasio Girardot a ver a Atlético Nacional puede ser algo cotidiano para la fanaticada Verdolaga, pero la primera vez en que se puede sentir esa sensación indescriptible de verlo jugar es algo único en la memoria de un niño, por eso la Escuela de Fútbol de Atlético Nacional invitó a 750 para que vivieran esa experiencia única.
Ir al estadio Atanasio Girardot a ver a Atlético Nacional puede ser algo cotidiano para la fanaticada Verdolaga, pero la primera vez en que se puede sentir esa sensación indescriptible de verlo jugar es algo único en la memoria de un niño, por eso la Escuela de Fútbol de Atlético Nacional invitó a 750 para que vivieran esa experiencia única.
Aparte de ver el triunfo cuatro a tres frente a Fortaleza, los niños y niñas verdolagas pudieron pasar un rato ameno con sus profesores y amigos, además de disfrutar de un refrigerio en el entretiempo el cual pasó entre risas e ilusión por ver la etapa complementaria.
Al final del partido expresiones de alegría, amor por Nacional y demás fueron el común denominador de los niños que hacen parte de los cuatro programas que tiene la Escuela en la que se trabaja desde los más pequeños hasta jóvenes que sueñan por defender cada día los colores de Atlético Nacional.