La situación vivida anoche en el estadio Atanasio Girardot al final del partido ante Huracán por la vuelta de los octavos de final de la Copa Bridgestone Libertadores de América nos dejó una verdad gigante: nuestros aficionados tuvieron un comportamiento ejemplar siendo solamente testigos y no protagonistas de los hechos incómodos del fin del juego.
La situación vivida anoche en el estadio Atanasio Girardot al final del partido ante Huracán por la vuelta de los octavos de final de la Copa Bridgestone Libertadores de América nos dejó una verdad gigante: nuestros aficionados tuvieron un comportamiento ejemplar siendo solamente testigos y no protagonistas de los hechos incómodos del fin del juego.
A todos los hinchas presentes en el estadio Atanasio Girardot un agradecimiento y un aplauso por no dejarse provocar del descontrol que surgió al final del juego y no poner en riesgos de sanción a nuestra Institución.
El respeto, la tolerancia y la paz en los estadios es siempre posible como lo vimos anoche y demostramos que vamos por buen camino en la búsqueda de estadios en paz y armonía.