A las afueras del aeropuerto de Chapecó, cientos de aficionados esperan a la delegación nacionalista para recibirlos y agradecer a una sola voz los actos de solidaridad de la institución verde hacia Chapecoense.
La ciudad se viste de verde no solo por los colores de su equipo, sino porque como ellos mismo lo dicen “cuando un hermano viene a visitarnos, la ciudad se desborda de emoción”.
A las afueras del aeropuerto de Chapecó, cientos de aficionados esperan a la delegación nacionalista para recibirlos y agradecer a una sola voz los actos de solidaridad de la institución verde hacia Chapecoense.
La ciudad se viste de verde no solo por los colores de su equipo, sino porque como ellos mismo lo dicen “cuando un hermano viene a visitarnos, la ciudad se desborda de emoción”.
En pocos minutos aterrizará el vuelo que trae consigo al plantel de Atlético Nacional y junto a él las emociones, ilusiones, sueños y un agradecimiento infinito por la fraternidad y hermandad que se ha hecho visible.