El vuelo que debió suceder hace 4 meses, apenas lo realizará hoy Atlético Nacional. La ida a Chapecó está programada para las 11 de la mañana de Brasil.
En cuestión de minutos el verde abordará el avión de la esperanza para jugar el Partido del Afecto. Ese detalle, solamente, acelera el corazón.
El vuelo que debió suceder hace 4 meses, apenas lo realizará hoy Atlético Nacional. La ida a Chapecó está programada para las 11 de la mañana de Brasil.
En cuestión de minutos el verde abordará el avión de la esperanza para jugar el Partido del Afecto. Ese detalle, solamente, acelera el corazón.
En 180 minutos, el Verdolaga estará en la ciudad hermana, al cobijo de un pueblo hermano y mañana jugará una final tan diferente a todas las de la historia. De visitante y con toda la hinchada a favor. Una final, la más distinta final de la historia del fútbol. Desde Guarulhos, aeropuerto en San Pablo, hasta Chapecó. A esta hora Nacional hace lo que debió hacer hace 4 meses. Aunque en esta ocasión, lo esperan para homenajearlo.
