El amor por Atlético Nacional no tiene límites. No importa si se es o no se es campeón, o si se juega en cualquier rincón del país o del mundo. Así lo demostraron los hinchas verdes anoche en Cúcuta cuando se acercaron hasta el hotel de concentración para recibir al equipo del profesor Juan Carlos Osorio.
Esta noche el Verdolaga jugará contra Cúcuta Deportivo por la última fecha de los cuadrangulares semifinales de la Liga. Y qué mejor aliciente que el apoyo incondicional de los centenares de hinchas que llegaron para cantarle a los jugadores y demostrar su amor por los colores verde y blanco que fue retribuido con firmas de autógrafos y algunas fotografías.
El sonido de los tambores se hizo más fuerte y sorprendió a todos. Los cánticos de apoyo «en las buenas y en las malas» no pararon, como muestra de este amor que se hace más grande sin importar los resultados. Ese mismo amor que se sintió en Barranquilla, Ibagué, Ipiales, Manizales, Montería, Bogotá, Cali, Barrancabermeja y Tunja. Ese amor que cruza frontera y no distingue acentos ni regiones, ese amor que produce Atlético Nacional, el equipo del país.
